Descubre los 10 lugares imprescindibles de Huesca, una ciudad con una rica historia que se remonta al siglo IV a.C. Situada en la Hoya de Huesca, su geografía incluye impresionantes vistas de la Sierra de Guara y el río Isuela, que atraviesa la ciudad.
Huesca es conocida por su vibrante cultura y tradiciones, que se reflejan en sus numerosas festividades y eventos a lo largo del año. La ciudad ha sido un punto clave desde la época íbera, pasando por el dominio romano y la reconquista cristiana, hasta convertirse en un centro cultural y administrativo.
La arquitectura de Huesca, con sus influencias romanas, visigodas y musulmanas, ofrece una fascinante mezcla de estilos. Sus calles están llenas de encanto, con edificios históricos y modernos que coexisten armoniosamente. La ciudad también es un importante centro educativo y religioso, sede de la diócesis de Huesca.
Este artículo te llevará a través de los rincones más destacados de Huesca, proporcionando una guía completa para explorar esta joya aragonesa. ¡Prepárate para enamorarte de Huesca y descubrir todo lo que tiene para ofrecer!
Catedral de Huesca
La Catedral de Huesca, también conocida como la Catedral de Santa María, es un majestuoso edificio gótico cuya construcción comenzó en 1294 y se completó a principios del siglo XVI. Situada en el punto más elevado de la ciudad, este templo reemplazó a la antigua mezquita mayor tras la reconquista cristiana.
La arquitectura de la catedral es impresionante, con una fachada principal adornada con esculturas de santos y figuras religiosas. Destacan su portada gótica con figuras de mártires, vírgenes y profetas, y el imponente retablo mayor de alabastro, obra de Damián Forment, que representa escenas de la Pasión de Cristo. Las bóvedas de crucería y las capillas laterales añaden al esplendor arquitectónico del lugar.
Dentro de la catedral, se pueden encontrar numerosas obras de arte y elementos históricos. Además del retablo mayor, hay pinturas barrocas y renacentistas que adornan las capillas, y una colección de orfebrería sacra que data del medievo hasta el barroco.
La catedral es también un importante centro cultural y religioso en Huesca, donde se celebran eventos litúrgicos y culturales a lo largo del año. Los visitantes pueden disfrutar de visitas guiadas para explorar sus tesoros artísticos e históricos. El horario de apertura de la catedral varía según la temporada, y la entrada tiene un costo general de alrededor de 4 euros, con descuentos disponibles para estudiantes y jubilados.
Monasterio de San Pedro el Viejo
El Monasterio de San Pedro el Viejo en Huesca es un impresionante ejemplo del arte románico aragonés, construido en el siglo XII. Este antiguo monasterio benedictino es famoso por su rica historia y su valor arquitectónico, que incluye una iglesia con tres naves y ábsides semicirculares, así como un claustro de arcos de medio punto y columnas dobles.
El monasterio también alberga los sepulcros de dos reyes aragoneses, Alfonso I el Batallador y Ramiro II el Monje, ubicados en la capilla de San Bartolomé. Este espacio sirve como panteón real y es uno de los puntos más destacados de la visita, ofreciendo una conexión directa con la historia medieval de Aragón.
Dentro del monasterio, los visitantes pueden admirar el retablo mayor de madera policromada, que data de 1602, así como varias capillas laterales con retablos renacentistas y barrocos. Las pinturas murales góticas del siglo XIII, que representan escenas bíblicas, añaden un toque artístico e histórico al lugar.
El Monasterio de San Pedro el Viejo es un importante centro cultural y religioso en Huesca, donde se celebran diversos eventos a lo largo del año. Está abierto al público con horarios de visita de martes a domingo de 10 a 14 h y de 16 a 18 h, y la entrada tiene un costo de 2.50 euros para adultos y 1.50 euros para estudiantes y jubilados.
Parque Miguel Servet
El Parque Miguel Servet, situado en el corazón de Huesca, es el parque más grande y antiguo de la ciudad. Inaugurado en 1928, se extiende sobre 6,95 hectáreas y ofrece una diversidad de flora y fauna, con plantas autóctonas y exóticas, y estanques habitados por patos, ocas y cisnes.
El parque es famoso por "Las Pajaritas", una escultura de Ramón Acín que se ha convertido en un símbolo de Huesca. Además, el parque alberga el quiosco de la música, que en sus inicios acogía a la Banda Municipal y ahora es un espacio para diversos eventos culturales.
Otro atractivo del parque es la casita de Blancanieves, una réplica de la casa de los siete enanitos, rodeada de un mural cerámico y un estanque de nenúfares, que encanta a los más pequeños. Cerca de la casita, la rosaleda ofrece un espacio de tranquilidad con su fuente y bancos.
El Parque Miguel Servet también tiene una zona de zoo donde se pueden ver diversas aves y animales pequeños, y un gran estanque con áreas de césped donde los visitantes pueden relajarse y disfrutar del buen tiempo. Este parque, con su combinación de naturaleza, arte y espacios recreativos, es un lugar imprescindible para quienes visitan Huesca.
Museo Diocesano de Huesca
El museo alberga una impresionante colección distribuida en cuatro salas. Estas colecciones incluyen obras de orfebrería, arte románico, gótico, renacentista y barroco. Entre las piezas destacadas se encuentran arquetas románicas del taller de Limoges, pinturas murales medievales, tallas policromadas y objetos litúrgicos de plata. La sillería del coro de la catedral, esculpida entre 1577 y 1591, también es una pieza notable.
El edificio en sí mismo es una joya arquitectónica, con elementos románicos y góticos que añaden un atractivo especial a la experiencia de visita. El claustro románico y el gótico del Papa Luna son espacios particularmente impresionantes, con sus sepulcros medievales y laudas sepulcrales.
El Museo Diocesano de Huesca organiza eventos culturales y exposiciones temporales, además de ofrecer visitas guiadas. Los horarios de apertura son de martes a sábados de 10 a 14 y de 17 a 20 h, y los domingos de 10 a 14 h. La entrada general tiene un precio de 4 euros, con descuentos para estudiantes y jubilados.
Muralla de Huesca
La Muralla de Huesca, situada en el casco antiguo de la ciudad, es una construcción histórica que data del siglo IX, cuando la ciudad estaba bajo dominio musulmán. Este sistema defensivo fue creado para proteger una de las ciudades más importantes del norte de Al-Ándalus. La muralla original llegó a contar con hasta noventa torres, aunque en la actualidad solo se conserva el Torreón del Amparo.
A lo largo de los siglos, la muralla ha sido objeto de numerosas reparaciones y reconstrucciones, incluyendo elementos tanto cristianos como islámicos. En 2006, fue declarada Bien de Interés Cultural de Aragón, y desde entonces ha sido sometida a trabajos de restauración y conservación para preservar su estructura y su valor histórico.
El interés turístico y cultural de la muralla reside en su rica historia y en la mezcla de estilos arquitectónicos que representan las diferentes épocas de su existencia. Además de ser un fascinante punto de interés para los amantes de la historia, la muralla ofrece a los visitantes una perspectiva única sobre la evolución arquitectónica y defensiva de la ciudad de Huesca.
Plaza Luis Lopez Allué / Ultramarinos La Confianza
La Plaza Luis López Allué, también conocida como Plaza del Mercado, es el corazón del casco histórico de Huesca. Este encantador espacio urbano se caracteriza por sus edificios de arquitectura tradicional aragonesa, con soportales y fachadas pintadas de colores vivos que crean un ambiente acogedor y vibrante.
En la plaza, se encuentra el histórico Ultramarinos La Confianza, la tienda de ultramarinos en activo más antigua de España, fundada en 1871. La plaza es un punto de encuentro habitual y acoge numerosos eventos culturales y festivos, incluyendo mercados tradicionales y ferias.
Además, la plaza es sede del Museo Pedagógico de Aragón, ubicado en el mismo edificio que la Oficina de Turismo de Huesca. Este museo ofrece una fascinante visión de la evolución de la educación en la región, con exhibiciones que incluyen aulas recreadas de distintas épocas.
Casino de Huesca
El Casino de Huesca, también conocido como Círculo Oscense, es un edificio histórico situado en la Plaza de Navarra, en pleno centro de la ciudad. Inaugurado en 1904, este edificio de estilo modernista fue diseñado por el arquitecto Ildefonso Bonells, y se ha convertido en uno de los referentes arquitectónicos y culturales de Huesca.
La arquitectura del Casino destaca por su fachada ornamentada con elementos decorativos en hierro forjado y cerámica. En su interior, los salones están ricamente decorados con pinturas, mobiliario elegante y una impresionante escalera central. Entre las estancias más destacadas se encuentran el Salón Azul, el Salón Rojo y la biblioteca.
El Casino de Huesca no solo es un lugar de reunión social, sino también un centro cultural que alberga una amplia variedad de eventos. Entre ellos se incluyen exposiciones de arte, conciertos, conferencias y presentaciones literarias, lo que lo convierte en un punto de encuentro clave para la vida cultural de la ciudad.
El Casino está abierto al público y ofrece visitas guiadas para aquellos interesados en conocer su historia y arquitectura. Los horarios y precios de entrada varían según la programación de eventos y las actividades disponibles.
Convento de San Miguel
El Convento de San Miguel, también conocido como las "Miguelas", es un destacado monumento histórico de Huesca. Fundado en 1110 por Alfonso I, este convento muestra dos fases constructivas: una medieval y otra del siglo XVII, cuando se incorporó al monasterio de las Carmelitas Calzadas.
La arquitectura del convento incluye una iglesia románica con una nave de ocho tramos cubiertos con una armadura de parhilera policromada. Su cabecera poligonal y las capillas laterales datan del siglo XIII, mientras que el conjunto conventual del siglo XVII se caracteriza por su sobriedad y funcionalidad.
El convento es un importante centro cultural que alberga diversos eventos y actividades religiosas. Está abierto al público para visitas y celebraciones litúrgicas. Los horarios de visita son de lunes a domingo, de 10 a 12 y de 16 a 18 horas, y la entrada es gratuita.
Parque Natural de la Sierra y los Cañones de Guara
El Parque Natural de la Sierra y los Cañones de Guara, declarado en 1990, es un enclave de espectacular belleza en Huesca, Aragón. Sus paisajes incluyen impresionantes cañones, ríos cristalinos y formaciones kársticas que ofrecen un refugio para una rica biodiversidad y un paraíso para los amantes de la naturaleza y el deporte.
Entre los lugares clave destacan los cañones del río Vero, Alcanadre y Mascún, ideales para el barranquismo y la escalada. Además, la sima de la Grallera Alta de Guara, con una caída vertical de 277 metros, es un atractivo para los espeleólogos. La flora y fauna del parque son igualmente notables, con especies endémicas y protegidas como el quebrantahuesos y el águila real.
El parque ofrece numerosas actividades como senderismo, observación de aves y rutas en bicicleta, adaptadas a diferentes niveles de dificultad. Además, cuenta con centros de interpretación en Arguis, Santa Cilia de Panzano y Bierge, que proporcionan información y educación ambiental a los visitantes. El parque está abierto todo el año y la entrada es gratuita. Los horarios de los centros de interpretación varían según la temporada.
