Sicilia

Estos son los siete imprescindibles que ver en Sicilia

Sicilia es la isla más grande de Italia y de todo el mar Mediterráneo, repleta de preciosas playas y pueblos encantadores y varias ruinas y yacimientos arqueológicos. Un conjunto de culturas, paisajes y gastronomía, bañado por la influencia y la conjugación de varios pueblos procedentes del norte de África y de países árabes.

Esta isla esta repleta de pueblos de piedra arenisca que se encuentran en la cima de las montañas, donde se hallan las ruinas centenarias de importantes asentamientos de varias civilizaciones a lo largo de la historia. En el siguiente post te presentamos algunos de los lugares que no puedes perderte si viajas a esta preciosa e histórica ciudad italiana.

¿Qué ver en Sicilia?

La capital, Palermo

Las calles de Palermo son una clara combinación de arquitectura árabe y mosaicos bizantinos, debido a que Sicilia está a medio camino entre Europa y el norte de África. Por sus calles encontrarás mercados similares a los antiguos zocos y un gran legado histórico, es una de las capitales italianas de la cultura. Entre los mercadillos destacan el Capo, Vucciria y Ballaro.

En la capital también te toparas con varias plazas adoquinadas y adornadas con bellos edificios, como la Piazza Vigliena o la Piazza Pretoria, que es la más majestuosa de toda la capital, con estatuas que representan a ninfas, tritones y deidades fluviales en pleno salto situadas en una hermosa fuente que se encuentra delante del ayuntamiento. No puedes dejar esta plaza sin antes visitar la catedral del siglo XII, la cual se ha ido a adaptando a diferentes estilos arquitectónicos y cambios estéticos en los que se entremezclan sobre todo los elementos catalanes y árabes.

La entrada principal a la catedral de Palermo, con elementos arquitectonicos árabes, mozárabes y cátalanes

Cefalú, el pueblo pesquero

Este original y pintoresco pueblo se encuentra en la parte norte del litoral, el lugar perfecto para perder la noción del tiempo y relajarse en sus playas, ya que son las mejores de toda la isla. Podrás descansar bañándote en su mar color turquesa y tumbándote en la arena dorada con vistas a los pescadores del pequeño puerto que está al lado. Si vas a la caída del sol, podrás disfrutar de uno de los mejores atardeceres de la isla.

Nuestra recomendación es que te pierdas por sus calles adoquinadas, bordeadas de casas de color amarillo y miel, con balcones repletos de ropa tendida y coloridas flores. En el pueblo es muy conocida la catedral normada del siglo XII, cuya belleza domina el paisaje urbano con dos grandes torres gemelas y elementos árabes y catalanes. La entra principal se encuentra al final de un sin fin de escaleras, haciendo que esta sea aún más majestuosa.

La entrada principal de la catedral con dos grandes torres y escalones de piedra

Islas Eolias, un paraíso remoto

Estas islas forman parte de un pequeño archipiélago que se encuentra al norte de la isla y son un verdadero paraíso compuesto por siete formaciones insulares donde podrás relajarte haciendo senderismo y excursiones. La isla más grande y animada de todas es Lipari, ya que es conocida por sus numerosas actividades acuáticas como dar una vuelta en kayak o en velero.

Si dedicas varios días a estas islas, podrás disfrutar de playas de arena negra, paisajes volcánicos en Stromboli y Vulcano, aldeas encaladas en Panarea y parajes más desconocidos en Filicudi.

Panorámica de uno de las formaciones insulares desde Sicilia con varios catus al principio de la foto

Catania, a los pies del volcán

Esta ciudad de puerto se encuentra en la costa oriental de la isla de Sicilia, justo en la falda del monte Etna. Dentro de su casco histórico destaca la Piazza del Duomo, que cuenta con una majestuosa estatua llamada la Fontana dell’Elefante. Otro de los lugares que ver en Catania sin perdida es la ornamentada Catedral de Santa Agata, ubicada en la Piazza Duomo, en cuya escalonada fachada barroca se pueden apreciar columnas corintias de granito con grandes esculturas de mármol donde aparecen Santa Ágata, San Euplio y San Berilo.

Por supuesto, no puedes irte de esta ciudad sin antes visitar y subir a lo más alto del el teatro romano, para así poder disfrutar de las mejores vistas de la ciudad.

Foto de Catania

Volcan Etna, el volcán más alto de Europa

El Etna es el volcán más elevado de todo el continente europeo y se encuentra en la costa este de la isla de Sicilia, dominando completamente el paisaje. Este volcán sigue activo y actualmente produce erupciones y desprende ríos de lava por sus laderas, que son el llamado Parco Dell’ Etna.

Visitar el Monte Etna es altamente recomendado durante nuestro viaje a Sicilia. La época del año más bonita para ver el volcán es en invierno, ya que es cuando la cima se cubre de nieve por encima de los campos de lava, que toman un color negro al secarse.

Este volcán fue declarado Patrimonio de la Humanidad en el año 2013 por la UNESCO y atrae a miles de personas cada año, deseando conocer sus rincones y sus cráteres activos.

Además, la región donde se encuentra el volcán Etna también es conocida por el enoturismo, hay vinos exquisitos y de gran prestigio con denominación de origen controlada.

Monte Etna nevado.

Siracusa, la antigua ciudad más grande del mundo

Siracusa es una ciudad que se encuentra en la costa jónica de Sicilia y es conocida sobre todo por sus antiguas ruinas griegas y romanas, además de haber sido en el pasado la ciudad más grande del mundo. En la actualidad, esta histórica ciudad fusiona las plazas barrocas y los edificios de piedra de tonos color pastel con el color turquesa del Mar Jónico.

Para conocer bien la ciudad hay que perderse por sus antiguas ruinas y contemplar las fachadas erosionadas junto con los restos arqueológicos de su gran patrimonio tanto griego como corintio. Entre sus calles encontraras la conocida plaza de Arquimedes y la fuente de Aretusa. También podrás visitar el castillo Maniace, que se encuentra justo en la costa de la ciudad.

En cuanto a su exuberante teatro griego, cabe destacar que es uno de los más grandes del mundo. Lo podrás encontrar en el parque arqueológico central de Neápolis, donde también está ubicada la Oreja de Dionisio, que es una cueva formada de piedra caliza que por supuesto, tiene forma de oreja. En cuanto al museo arqueológico regional Paolo Orsi, expone piezas de terracota, retratos romanos y escenas del Antiguo Testamento talladas en mármol blanco.

El último lugar que no puedes irte sin visitar es la isla de Ortigia, donde podrás sumergirte en los sabores sicilianos de su mercado local, donde se venden productos como quesos, carne y pescado fresco.

Panorámica desde el cielo de la ciudad de Siracusa y del Castillo de Maniace

El Valle de los Templos

Por último, pero no menos importante, nos dirigimos a una de las ciudades más antiguas de la isla, el autentico epicentro de ruinas históricas, ya que es el mas importante de los conjuntos que se encuentran en la región del sur de Sicilia: el conocido Valle de los Templos. Uno de los grandes ejemplos arquitectónicos de la antigua Grecia clásica.

Este conjunto arquitectónico se encuentra cerca de Agrigento, en el sur de la isla, en el territorio se conoce como la Magna Grecia. Todos los templos que hay allí se construyeron a partir del año 580 a. C.

El famoso templo de la Concordia es uno de los claros ejemplos de estilo dórico y uno de los mejor preservados en todo el mundo. En cuanto al jardín de la Kolymbetra, este ha recuperado su majestuosidad y esplendor original después de varios años abandonado. Su gran extensión de 50.000 metros cuadrados acoge un gran abanico de plantas que van desde antiguos cítricos, chumberas, moreras, sauces y álamos blancos.

El famoso templo de la Concordia es uno de los ejemplos de estilo dórico, preservado perfectamente, con una estatua de bronce

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