Francia es el país más turístico del mundo, pero Nantes es uno de sus secretos más desconocidos. Es la joya del oeste de Francia y está situada en la ribera del río Loira, mundialmente conocido por sus castillos.
Esta ciudad es la capital actual de Países del Loira (nombre de la región), aunque lo fue de la Bretaña Francesa, y un lugar donde modernidad e historia crean un espacio urbano con un atractivo sin igual en todo el país, gracias en parte al legado de uno de los más famosos escritores de todos los tiempos, Julio Verne.
Pero sin duda Nantes es una ciudad que ha sabido reinventarse y cambiar su imagen de ciudad de la Revolución Industrial del siglo XIX a ciudad moderna, cultural y cosmopolita, no en vano fue declarada Capital Verde Europea en 2013.
Tanto si aún no te has decidido a visitarla o estás a punto de hacerlo, te invitamos a descubrir que visitar en Nantes en este post con Womondoo.
Catedral de Nantes
Este es uno de los templos que más tiempo ha llevado construir en Francia, tanto como 500 años. Su estilo es predominantemente barroco, pero al demorarse tanto la construcción tiene características de otros. Es similar en tamaño a la célebre Notre Dame de Chartres pero con una fachada no tan espectacular. Si hay un elemento que destaca en esta son sus 2 torres de gran tamaño. Fue declarada Monumento Histórico Nacional en 1862, sin embargo la suerte no es algo que acompañe a este edificio, ya que durante la Segunda Guerra Mundial sufrió las consecuencias de los bombardeos y en épocas más recientes un incendio.
Quizás lo más interesante esté en su interior, ya que alberga los sarcófagos de Francisco II (el que fuera último Duque de Bretaña) y su esposa, considerados obras maestras de la escultura renacentista. Destaca también su cripta románica.
Castillo de los duques de Bretaña
Francia, y en concreto la rivera del Loire, son famosos por sus castillos. La construcción del Castillo data del siglo XII y fue utilizado como residencia oficial de los Duques de Bretaña hasta el siglo XV. Durante los siglos XVI y XVII fue la residencia de verano de los reyes de Francia. Su uso ha ido variando a lo largo de la historia, hasta siendo utilizado como búnker-cuartel por los alemanes durante la Segunda Guerra Mundial.
Este maravilloso castillo ha sido declarado Patrimonio de la Humanidad y en su interior puedes visitar el Museo de Historia de Nantes. El paseo por sus murallas es imprescindible gracias a las vistas sobre la ciudad y el castillo.
Passage Pommeraye
Sin duda, una de las cosas que merece la pena ver en Nantes. Este pasaje fue construido para comunicar la Plaza Royale y la Plaza Graslin.
Si por algo destaca es por su increíble cubierta acristalada y la gran escalera que comunica los tres pisos de altura.
Actualmente, es un centro comercial en el que puedes encontrar tiendas de las mejores firmas de lujo y un lugar inmejorable para hacer fotos gracias a su galería acristalada.
Las máquinas de la Isla de Nantes
Esta es una de las cosas imprescindibles que ver en Nantes. Si te preguntas de que se trata, nuestra respuesta que vayas y lo compruebes por ti mismo (en este caso hay que verlo para creerlo).
Básicamente, es un mundo artificial que recrea los mundos literarios creados por dos genios adelantados a su época: Julio Verne y Leonardo da Vinci. El resultado: un increíble ecosistema compuesto por multitud de máquinas gigantes que tienen vida propia y que representan a animales como la garza, la hormiga o la araña. En algunos de ellos es posible subirse e incluso conducirlos.
Sin duda, el más famoso de ellos es el elefante gigante, el cual mide unos 12 metros de altura y pesa unas 48 toneladas. Tiene capacidad para unos 50 pasajeros y sus paseos duran una media de 30 minutos. Eso sí, a una velocidad de entre 1 y 3 kilómetros por hora.
Altamente recomendable es también el carrusel de los mundo marinos, en el cual podrás conocer el fondo del mar en tres niveles, cabalgar un cangrejo gigante o un calamar, no es algo que puedas hacer todos los días.
Isla de Versailles
Nantes es una de esas ciudades capaz de sorprenderte por sus rincones llenos de encanto.
Aunque el nombre de esta isla artificial nos traslada a la corte francesa, lo que te encontrarás allí es un magnífico jardín japonés con su casa del té, sus cascadas, sus estanques, sus cerezos. Todo ello en el marco Zen que rodea a este tipo de lugares propios del país del sol naciente.
La Ribera del Erdre
En ocasiones ha sido denominado como el río más bonito de Francia. Es posible hacer un recorrido a través de sus aguas durante el cual descubrirás las numerosas casas señoriales y castillos distribuidos en los márgenes del río.
La Torre Lu
Es difícil que no hayas oído hablar de las mundialmente famosas galletas de Príncipe de Beukelaer. La empresa que las popularizó fue la marca francesa conocida como LU y tenía su sede aquí en Nantes, concretamente en el lugar actualmente conocido como Lieu Unique, que debe su nombre a las iniciales de la marca.
Una caja de galletas en la parte superior de la torre y una sala en su interior en la que se explica historia de las galletas LU recuerdan sus orígenes. Actualmente es un un edificio con varios usos, pero lo que realmente te recomendamos es admirar las increíbles vistas que se divisan desde su torre.
Museo Julio Verne
Probablemente no lo sabías, pero el que probablemente es el más célebre escritor de ciencia ficción de todos los tiempos nació y vivió en Nantes. Su imprenta es todavía reconocible en la ciudad, pero si realmente quieres conocer su vida, te recomendamos visitar la casa museo que lleva su nombre, en la que por cierto, nunca vivió.
Tour Bretagne
En el horizonte de la ciudad sobresale un edificio sobre todos los demás gracias a sus 144 metros de altura y sus 32 pisos, es la conocida como Torre de Bretaña. Te recomendamos visitarlo, ya que posee algunas de las mejores vistas de la ciudad gracias a una galería de 360 grados que está situada en sus cima.
Por si esto fuera poco, en su interior alberga uno de los bares con más personalidad de la ciudad “Le Nid”, cuya peculiaridad es la cigüeña gigante que encontrarás en él.
Distrito Bouffay
Si buscas un lugar para ir de compras y comer en Nantes, no lo dudes, este barrio es tu sitio.
Era el antiguo corazón histórico de la ciudad y actualmente lo sigue siendo. Mayormente peatonal, es el el lugar donde se ubican las famosas Galerías Lafayette ( el equivalente al Corte Inglés en Francia). Si quieres tomar algo o simplemente comer, el barrio está lleno de establecimientos que al atardecer se llenan de gente.
¿Qué ver en los alrededores de Nantes?
Le Puy do Fou
Situado a una hora en coche en el pueblo de Les Epesses, este es el segundo Parque Temático más visitado de Francia, sólo por detrás de Disneyland. Ha tenido el honor de ser distinguido como mejor parque del mundo gracias al “Premio Classic Thea 2012”.
Su mayor atractivo son los espectáculos, a través de los cuales se recorre la historia de Francia que van desde los vikingos a los mosqueteros. El parque dispone también de hoteles temáticos en los que alojarse.
Grand lieu lake
Situado a unos 15 kilómetros de Nantes. Se trata del lago natural más grande de Francia y es un paraíso para las aves acuáticas. Un lugar ideal para visitar con la familia gracias a la facilidad para divisarlas. Si hay algo que seguramente te llamará la atención es la garza real, ya que aquí reside una de las mayores colonias de Europa.
Canal Nantes-Brest
Este maravilloso canal conecta las dos ciudades y va desde la ciudad de los Duques de Bretaña hasta el Norte de Finisterre. Tiene unos 360 km de largo y unas 236 esclusas que regulan su caudal. Francamente, si tienes tiempo, es una de las cosas que te recomendamos. El recorrido en crucero por los valles bretones como el Erdre, el Aulne o el Vilaine, el Oust y el Blavet, está lleno de castillos y fortalezas medievales. Existe la posibilidad de realizar el recorrido en bici a través del camino paralelo que lo recorre.