Vista de San Gimignano

Visitar San Gimignano: Un día por la ciudad toscana de las torres

La Edad Dorada

Siglo XIII, la Toscana es la parte más sureña del Sacro Imperio Romano Germánico y muchas de sus ciudades viven un auge económico gracias a coexistir en un contexto más Europeo. Tal es la circulación con el resto de capitales imperiales que incluso villas de paso en sus caminos tenían la posibilidad de alzarse con un buen estatus. Una de las poblaciones que logra sacar provecho de esta circunstancia es San Gimignano, la cuál supone una de las paradas de la Vía Francigena. Esta vía, que existía desde el año 990, hacía que viajeros que iban a Roma desde Canterbury, Reims o Lausanne pasasen por ahí.

Eso provoca que hacia 1200, San Gimignano sea una ciudad independiente del dominio de los obispos de la zona y que se beneficia de vender por toda Europa, Siria y Egipto su azafrán. También tiene una muy alta reputación su Vernaccia (vino blanco), el cuál sería nombrado por Dante Alighieri hacia 1320 en su obra La Divina Comedia. Si sumamos que acabaría de edificar sus murallas en 1214 con los accesos por los caminos que iban a Pisa y a Siena, todo ello nos habla de una ciudad que parecía tocar su clímax de modernidad y relevancia. Pero esta sufriría un contratiempo en la escalada durante ese siglo, entre 1255 y 1261.

UNo de los portales de acceso al centro de San Gimignano

En ese momento hay una lucha de poderes entre el mundo imperial (gibelinos) y el orden que quería imponer el papado en el imperio (güelfos). San Gimignano que está del lado gibelino, es tomada por el lado güelfo durante esos 6 años condicionando su desarrollo. Si bien luego se recuperaría relativamente la normalidad tras la Batalla de Montaperti, una cierta tensión entre familias queda latente. Eso sumado a la Peste Negra de 1348, hacía que la ciudad en 1351 cediese su independencia a Florencia finalizando su etapa dorada tras 2 siglos de gran relevancia.

El gran parón y el redescubrimiento

Si bien mantenerse en la esfera de influencia de Florencia podía tener sus ventajas a nivel artístico y comercial, San Gimignano sufriría un progresivo parón del que tocaría fondo en el siglo XV. De las 72 torres que existían en la ciudad a finales de la Edad Media, sólo quedan 25 para 1580 y se iría reduciendo el número hasta las 14 que se preservan en la actualidad. El hecho de vivir cada vez más a la sombra de las capitales cercanas, genera que la población se quede en una cápsula temporal en la que poco o nada se invierte en nueva arquitectura. Simplemente se subsiste con el legado de su época dorada y desaparece todo aquello que las guerras, la economía y el poder desatienden.

Esa cápsula se mantendría hasta el siglo XIX cuando el Romanticismo y los nacionalismos pusieron a nuevas generaciones a redescubrir su país y su historia. Esta y otras ciudades de la zona se estudiarían y preservarían en lo que para ellos es parte del legado que legitima el nacimiento de una nueva nación, Italia. A partir de este espíritu el turismo ha ido ganando protagonismo en sus calles hasta la actualidad. Por eso, vamos a ofrecer una ruta para poder disfrutar de los diferentes monumentos que definen a San Gimignano, pero primero hablaremos de su clima y de cómo acceder a ella desde las capitales más próximas.

El clima de San Gimignano

El clima en la Toscana es templado con una temporada de invierno fría (entre los 0 y los 9ºC) y unos veranos cálidos que pueden alcanzar de promedio los 31ºC. La época más agradable de temperaturas se expande desde mayo hasta septiembre, cuando la temperatura promedio está por encima de los 15ºC. Para un estudio completo, os facilitamos el siguiente link

¿Cómo llegar?

Desde Florencia: Si queremos llegar con coche la vía más rápida es la Raccordo Autostradale que va de Florencia a Siena. Si lo hacemos en transporte público, la forma más rápida es la combinación de las líneas 131 y 130 de bus, con el cambio de línea en Poggibonsi.

Desde Siena: Se pueden usar los mismos medios que desde Florencia tanto en vehículo particular como en transporte público, pero tomando la dirección inversa.

En cualquiera de los dos casos, el autobús nos va a dejar al lado de la Porta San Giovanni al sur de la ciudad e igualmente el acceso con coche facilita la entrada por ahí. Eso sí, el coche se va a tener que aparcar fuera de murallas ya que el centro histórico de la ciudad es plenamente peatonal, con unas pocas excepciones.

La ruta

De la Porta San Giovanni a la exposición de 1300

Ante nosotros tenemos la puerta de acceso más importante en los muros de San Gimignano. Terminada en 1262, San Giovanni es el acceso que representa el tránsito por la Vía Francigena y en concreto para los que iban y venían de Siena. Por encima del arco del acceso vemos una pequeña construcción sustentada por el muro que era la caseta de vigilancia. A su lado y tras la muralla, ya podemos vislumbrar la primera torre dentro de nuestra ruta, el campanario de la Iglesia de la Madonna dei Lumi. Este templo es de las pocas construcciones del centro de la ciudad más allá de lo medieval, en concreto del periodo barroco.

Al cruzar por debajo del arco de estilo sienés nos encontraremos en la transitada Via San Giovanni, en ella tenemos una primera parada que sólo es recomendable para personas que no sean demasiado aprensivas o sensibles. El Museo della Tortura, tal vez no es la visita familiar que muchos desean pero para los interesados consta de mucho material muy visual en forma de esculturas. Su muestra se divide en dos partes, una ubicada en el número 125 dedicada a la parte de la Inquisición y otra más adelante en el 82 sobre la pena de muerte. La primera, dispone de una cafetería con terraza con vistas a la Toscana, una buena manera de darnos un respiro tras las emociones fuertes.

Horario

De lunes a domingo de 10 a 19h

Precios
  • Precio completo: 10 euros
  • Precio reducido: 7 euros
  • Precio de grupos: 5 euros
Contacto

Igualmente, si no entramos en esta exposición aún nos quedan grandes alternativas con sólo avanzar un poco más en esta calle. La primera de ellas la tenemos si vamos al número 15, donde se encuentra la Casa y Torre Campatelli. El encanto de esta casa es que conserva todo de objetos y mobiliario originales y también que tiene una proyección de un audiovisual que explica cómo era el día a día de la gente que vivía en la villa a lo largo de los siglos. Además sumamos la segunda torre a nuestra colección visual, desafortunadamente no es visitable. Dentro de San Gimignano, sólo nos abrirán el acceso a dos de las torres, pero eso lo iremos desvelando mientras recorramos sus calles.

Esquina por esquina con la Casa Campatelli, tenemos el Palazzo Cugnanesi con su propia torre. Esta construcción del siglo XIII formaba parte de la primera muralla que hubo en la ciudad antes de ser derribada parcialmente durante la ocupación güelfa. Al recomponerse la misma años después, este tramo que quedó dentro del nuevo perímetro se aprovechó para hacer este palacio. La tercera torre hace esquina con la Via di Quercecchio, la cual al seguirla y al girar a la derecha por Via Costarella, nos llevará al museo SanGimignano1300. En su interior nos permitirá conocer cómo era la ciudad durante el siglo XIV, destacando por encima de todo su espectacular maqueta recreando la ciudad de esa época.

Horarios
  • Casa y Torre Campatelli: Cada día de 10:30 a 19h
  • SanGimignano1300: Cada día de 9 a 19h
Precios
  • Casa y Torre Campatelli: 7 euros
  • SanGimignano1300: 5 euros (Adultos), 3 euros (Niños hasta 10 años), Gratis (Niños hasta 6 años), 4 euros (Grupos +20 personas y estudiantes)
Contacto

Casa y Torre Campatelli

SanGimignano1300

Del Arco dei Becci a San Lorenzo in Ponte

Volvemos a la Via San Giovanni para cruzar por debajo del Arco y la Torre dei Becci (cuarta torre del recorrido), y aparecer a la considerada por muchos la plaza más bella de San Gimignano, la Piazza della Cisterna. Su nombre viene dado por la cisterna de agua que hay situada debajo del pozo central y que fué construida en 1287. Pero otro hecho la hace sumamente importante, el cruce de la Vía Francigena y la Vía Pisa-Siena se da en ella. La Francigena es la unión de Via San Giovanni, el eje vertical de la Piazza y la Via San Matteo. De la segunda sólo queda una visión más abstracta a través de la Via de Castello y el acceso a la Piazza del Duomo que hay en la esquina superior.

Justo al lado del pozo se sitúa la Torre del Diavolo, la cuál ya es la quinta en la ruta y recibe su nombre por una leyenda urbana. El dueño de la misma marcharía de viaje durante un tiempo y al volver se percataría de que se había vuelto más alta. Éste justificaría el hecho en que tenía que ser una obra del diablo. Pero no sólo esta torre parece querer intimidar al visitante, ya que al inicio de la Via de Castello nos depara la tercera sucursal del Museo della Tortura llamado Museo Criminale Medioevale. En ella se amplía la colección vista en las otras dos exposiciones de la Via San Giovanni, sin dejar opción a que alguien se quede insatisfecho de la cantidad de material macabro que nos ofrecen.

Horario
  • De 10 a 18h de lunes a viernes
  • De 10 a 19h sábado y domingo
Precios
  • Precio completo: 10 euros
  • Precio reducido: 7 euros
  • Precio de grupos: 5 euros
Contacto

Si seguimos por Via del Castello hasta el número 24 tendremos una interesante curiosidad para la que os recomendamos que os hagáis con el San Gimignano Pass. Este pack de entradas nos permitirá acceder a varios museos clave de la ciudad. En este caso lo usaremos para la Iglesia de San Lorenzo in Ponte, la cual contiene unas pinturas murales góticas realizadas entre el siglo XIV y el XV por Simone Martini y Cenni di Francesco. En ellas se nos hace referencia a San Lorenzo y su capacidad de liberar almas del Purgatorio. Estas imágenes tenían que evocar la idea de la vida tras la muerte y los diferentes destinos de las almas según haya sido su comportamiento en este plano.

Horario

Todos los días de 10 a 13h y de 15 a 19’30h

Precios

Incluido en el San Gimignano Pass: 13 euros (Adultos), 10 euros (Niños entre 6 y 17 años)

Contacto

De la Piazza del Duomo a la Rocca

Recorremos de vuelta el trayecto hasta la Piazza della Cisterna y nos dirigimos al acceso a la Piazza del Duomo. Este punto de la ciudad es el más simbólico para cualquiera que ha buscado información de la misma. Frente a nosotros tenemos el Duomo (en italiano catedral) construido entre los siglos X y XII y que oficialmente se llama Collegiata de Santa Maria Assunta. Su estilo artístico es el románico que le otorga esta fachada mucho más minimalista y una estructura exterior más básica. Pero la sorpresa interior es mayúscula, ya que la calidad de las pinturas murales en las naves laterales de la misma es sublime.

A esto le añadimos la bella decoración de los arcos de medio punto con esa combinación de marmol blanco y negro o los techos con vuelta de crucería adornados. Un conjunto muy espectacular que aborda la temática del Antiguo, el Nuevo Testamento y el Juicio Final. La autoría es muy variada, pero se mueve dentro de las fronteras de los artistas de la Toscana. El estilo gótico sienés de Lippo Memmi y Taddeo di Bartolo o el Renacimiento de siglo XV de Domenico Ghirlandaio o Benozzo Gozzoli. A nivel artístico y por la complejidad de sus obras estamos ante una de las obras maestras del paso entre el Gótico y el Renacimiento

Al salir de nuevo a la plaza tenemos una perspectiva muy reveladora. Frente a nosotros y emergiendo entre los edificios medievales tenemos las torres Chigi y Rognosa. Esta segunda, también llamada Torre del Podestá, es curiosamente la segunda más alta de todo San Gimignano (51 m) y aunque normalmente es visitable, lleva tiempo inaccesible por trabajos de restauración. Como curiosidad, esta torre estaba ligada al podestá como su nombre indica, que era el que cumplía las funciones de gobernador en la ciudad. Pero cuando este cargo se trasladó a vivir al Palazzo Comunale, el edificio y la torre servían de prisión de maleantes, pasando a tomar su nombre de torre roñosa.

Si nuestra vista sigue hacia la derecha, nos encontraremos en la esquina junto a la Piazza della Cisterna, la Torre degli Ardingheli. Esta se construyó más alta que la Torre Rognosa, pero la normativa municipal obligó a que ninguna torre excepto la siguiente que veremos, pudiera superarle en altura. Eso obligó a que la rebajasen de altura en 1255, dejando como única rival a la Torre Grossa (54 m). Esta construcción de 1311 la podríamos catalogar como el rascacielos medieval de la Toscana y se puede visitar con la misma entrada con la que accedemos al Museo Civico que está en Palazzo Comunale. Al llegar a su cumbre nos encontraremos ante la imagen más espectacular de toda la ruta. En la foto siguiente se pueden ver las vistas hacia el este, con la Torre Rognosa delante y en el fondo toda la Toscana que llega hasta el horizonte.

Haciendo unos apuntes sobre el Palazzo Comunale, el edificio fué construido entre finales del siglo XIII y principios del XIV. Sus diferentes plantas, que acogen varias secciones del Museo Civico y la Pinacoteca, tienen obras de Lippo Memmi, Filippino Lippi, Pinturicchio o Benedetto da Maiano. Las obra más trascendental que contiene para su época es la Maestá de la Sala de Dante de Lippo Memmi, hecha en 1317. La elaboración de esta obra fué pagada entre el propio artista y su padre cuando este aún era menor de edad. A partir de esta obra Memmi se fué construyendo una reputación por toda la Toscana y convirtiéndose en uno de los genios más grandes del Gótico.

Horario

Todos los días de 10 a 19’30h

Precios

Incluido en el San Gimignano Pass: 13 euros (Adultos), 10 euros (Niños entre 6 y 17 años)

Contacto

Justo pegada a la Piazza del Duomo en el lateral de la Collegiata, tenemos la Piazza delle Erbe. En ella podemos ver juntas las torres diez y once en el recorrido, las torres Salvucci y Pettini. Pero nuestra ruta sigue detrás de nosotros con un pequeño callejón que nos conducirá a la Via della Rocca, la cual si tomamos por la izquierda nos conducirá a los restos de la Rocca de Montestaffoli. Esta era la fortaleza que tuvo que construir la ciudad ya que tras someterse a Florencia, empezó a recibir ataques de la ciudad de Siena ya que eran capitales rivales. Actualmente sólo quedan las ruinas de la fortaleza, pero el acceso al montículo donde estaba, se pueden disfrutar unas grandes vistas y es gratuito.

Horario

Abierto las 24 horas

Precio

Gratuito

Contacto

Hacia Sant’Agostino y la Fuente Medieval

Para ir a la última sección de nuestra ruta deberemos volver a la Piazza del Duomo donde tenemos el acceso a la Via San Matteo la cual seguiremos durante unos 500 metros hasta llegar a la Puerta de San Mateo. A nuestra derecha está el acceso de la Via Cellolese, que nos servirá para continuar el camino y que a los pocos metros ya nos dejará ver como llegamos a la Piazza de Sant’Agostino y nuestro motivo para acercarnos a ella, la Iglesia de Sant’Agostino. Esta construcción de 1298, resulta toda una rareza a nivel estilístico ya que si bien es de plena época gótica, su austeridad es más típica de la arquitectura románica.

Horario
  • De abril a octubre: De 10 a 12h y de 15 a 19h
  • Noviembre y diciembre: De 10 a 12h y de 15 a 18h
  • De enero a marzo: los lunes de 16 a 18h y de martes a domingos, de 10 a 12h y de 15 a 18h
Precio

Gratuito

Contacto

En el interior nos llevamos otra sorpresa igual que el Duomo, ya que mezcla la pura elegancia de las paredes blancas con las capillas y el ábside ricamente decorados. Artistas destacados del Renacimiento de los siglos XV y XVI intervendrían como Benedetto da Maiano, Piero di Pollaiolo o Andrea della Robbia intervienen con sus pinturas, esculturas y suelos decorados. Tras deslumbrarnos con el arte de su interior, abandonamos este templo para ir al último punto de nuestra visita el cual queda en un punto un poco más apartado del transitado centro de la población. Para ello tendremos que tomar la Via Guglielmo Marconi hasta que a nuestra izquierda veamos el inicio de la Via Folgore da San Gimignano.

Al andar la primera manzana de esta vía, nos toparemos con el camino que debemos tomar a nuestra derecha, la Via delle Fonti. A medida que vayamos avanzando por ella nos iremos alejando de la civilización para tener la sensación que nos adentramos en una excursión por el bosque. Cuando crucemos la Porta delle Fonti sólo nos quedará una pequeña cuesta tras la que veremos las Fuentes Medievales. Esta es una estructura con origen en el siglo IX a la que se le añadieron unos arcos durante los siglos XIII y XIV con toques románicos y góticos. Un rincón de tranquilidad para cerrar nuestra ruta por la ciudad medieval de las torres.

Horario

Abierto las 24 horas

Precio

Gratuito

Contacto

Mapa de la Ruta

Propuestas alternativas por la zona

Mapa con atractivos turísticos de San Gimignano

Contenido relacionado

¿Qué te ha parecido este artículo?