La provincia de Albacete está repleta de lugares preciosos que descubrir, cómo sus maravillosos pueblos y su entorno natural. En el siguiente post recorreremos gran parte del territorio de la provincia para conocer más sobre su patrimonio histórico y su historia. Además también veremos algunos entornos naturales como el nacimiento del río Mundo y las sierras que rodean algunas de estas localidades, como la Sierra del Segura y la Sierra del Júcar.
Los pueblos más bonitos de Albacete
Albacete ciudad
Esta ciudad tiene varios monumentos, parques y museos importantes, como la plaza del Altozano en el centro de la ciudad, el centro neurálgico de esta. La ajardinada plaza está rodeada de varios edificios con un gran valor arquitectónico. En el centro de la plaza se encuentra el Monumento al Cuchillero de Albacete. En el centro de la ciudad también se encuentra la Catedral de Albacete, que pertenece al siglo XX y cuyo interior aguarda grandes óleos pintados sobre lienzos.
Otros puntos de interés de la ciudad son el Pasaje de Lodares, el edificio del Ayuntamiento, el Museo de la Cuchillería y el Parque de Abelardo Sanchez.
Alcalá del Júcar
Este es sin duda el pueblo más bonito de Albacete, ya que además es el único que esta dentro de la Asociación de Pueblos más bonitos de España, lo que ha convertido al pueblo en el más visitado de toda la provincia. Alcalá de Júcar se encuentra encaramado a una colina y está a las orillas de un precioso meandro del río Júcar, donde las casitas blancas se extienden por toda la ladera. El conjunto arquitectónico de casas esta presidido por un precioso castillo que se ve desde cualquier punto del pueblo.
Lo mejor es conocer el precioso casco histórico del pueblo, a donde se puede llegar a través del Puente Romano y adentrarse en las conocidas Cuevas del Diablo, para así recorrer las encantadoras callejuelas del centro.
Al estar al lado del famoso río Júcar, el entorno natural es maravilloso y en verano se puede disfrutar de una pequeña palpita que hay dentro del propio pueblo.
Yeste
Este precioso pueblo de Albacete tiene un reconocido casco histórico de estilo medieval en un gran enclave natural, ya que se encuentra en medio de la Sierra del Segura, en un valle profundo repleto de vegetación y varios atractivos medioambientales.
En este pueblo también hay un magnifico castillo, con una gran fortificación de origen Andalus, el cual se levanta sobre el pueblo para poder ser apreciado desde cualquier lugar del mismo. Dentro de su casco histórico también hay que destacar el gran Convento de San Francisco o la conocida Iglesia de la Asunción.
Alcaraz
Este pequeño pueblo se diferencia de todos los demás pueblos por las dos altas torres de estilo renacentista, cuyos cimientos se asientan en lo alto del Cerro de San Cristobal. Dentro del gran conjunto histórico que conforma este municipio, se encuentra la monumental plaza Mayor, justo donde se encuentran las dos torres. Una de las torres pertenece a la preciosa Iglesia dela Santísima Trinidad y Santa María, mientras que la otra es la Torre del Tardón. Otros enclaves turísticos del pueblos son el Ayuntamiento y la Lonja del Corregidor.
Pero aún quedan muchos rincones arquitectónicos por descubrir, tanto los restos de la antigua atalaya defensiva, cómo el famoso acueducto, las portadas de acceso, las casonas blasonadas, los preciosos arcos y demás templos.
Cabe destacar el entorno natural de la Sierra de Alcaraz, un gran espacio natural que tiene varios atractivos para los que probablemente necesites más de un día para visitarlos.
Ayna
Esta pequeña localidad es conocida por aparecer en la película "Amanece, que no es poco" de Jose Luis Cuerda, ya que fue el pueblo donde tuvo lugar la mayor parte del rodaje del largometraje, y por ello existe una ruta especial con su propio nombre.
La localidad se encuentra en la zona de la Sierra del Segura, más concretamente en la profunda garganta que se encuentra horadada por el río Mundo. Esta zona también es conocida como la Suiza manchega. Además, la localidad se encuentra entre altas y afiladas paredes, por lo que la población no ha podido crecer más por los limites naturales y por ello su plano urbanístico es en forma de escalera, al lado del lecho del río Segura.
En Ayna destacan sobre todo los impresionantes miradores, a través de los cuales se puede disfrutar de unas preciosas vistas del enclave natural. Entre los miradores destaca el del Diablo, el de los Mayos y el mirador de la Rodea Grande.
Por último, no puedes dejar este pueblo sin antes dar un bonito paseo por su rincón natural, mas conocido como Rincón de la Toba.
Almansa
Este pueblo es uno de los más grandes de toda la provincia de Albacete, ya que tiene una población de casi 25.000 habitantes. Quizás su nombre te suene por la conocida y estudiada Batalla de Almansa, donde comenzó la guerra de sucesión al trono por parte de los Borbones al comienzo de su dinastía. Por ello, el 25 de abril se lleva a cabo una recreación histórica de este hito que pertenece a la historia de España.
El famoso Castillo de Almansa es para muchos el más bonito de toda la provincia y el cual se encuentra sobre una gran mole rocosa, por lo que puedes verlo cuando te vas acercando a la localidad. Este castillo fue declarado Conjunto Histórico Artístico, en parte por su importante pasado árabe, el cual queda reflejado en parte de su arquitectura.
En cuanto al centro histórico, está repleto de casas solariegas, callejuelas estrechas y magníficos palacios como el de los condes de Cirat. También destaca la preciosa Iglesia parroquial de la Asunción.
Chinchilla de Montearagón
Por último, pero no menos importante, destaca este bonito pueblo de la provincia de Albacete, que se encuentra a tan solo 15 minutos en coche desde la capital. De hecho Chinchilla fue capital hace muchos años atrás.
Esta villa medieval tiene un precioso casco histórico, donde encontramos el conocido Castillo de Chinchilla, que domina la llanura, la monumental Plaza Mayor del centro del pueblo, y por supuesto, sus palacios, patios, iglesias y estrechas callejuelas por las que es muy fácil perderse. En este pueblo podemos encontrar hasta unas cuevas, en El Barrio conocido como las Cuevas del agujero, donde hay pequeñas casitas con chimeneas de color blanco que han sido excavadas en la propia roca justo a los pies de la gran muralla medieval.