Bosnia y Herzegovina es un país que ha sido el punto de encuentro de diferentes culturas y civilizaciones durante la historia. Uno de sus lugares mágicos que nos transportan al pasado es Blagaj.
Esta pequeña aldea se encuentra a tan solo a 12 km al sur de Mostar, con unos 30 minutos de ruta en coche nos plantamos en ella. Blagaj esconde algunos de los tesoros más desconocidos de Europa: el Vrelo Bune y el Monasterio de Blagaj Tekija. ¡Atrévete a conocer esta localidad!
Visitar Blagaj
Blagaj, una región con aguas subterráneas
Blagaj es un pueblo fantástico con una naturaleza y cultura que cautiva al instante. El pueblo está rodeado por un paisaje lleno de diversidad con aguas subterráneas y acantilados rocosos. Quedarás asombrado por su variedad de especies en cuanto a flora y fauna. Más de 170 tipos de aves viven en esta zona junto con plantas de hojas perennes y matorrales.
¿Cuándo visitar Blagaj?
El lugar también cuenta con otra peculiaridad. La mayor parte del año luce el sol, más de 200 días son soleados. Sin duda, puedes visitarla cuando quieras escapar del frío europeo. Probablemente, recibió su nombre debido a sus patrones de clima templado, ya que la palabra “blaga” en serbocroata significa “suave”.
¿Qué ver en Blagaj?
Atractivos turísticos en el mapa
Manantial de Buna o Vrelo Bune
El nacimiento del Río Buna, con aguas extremadamente frías y limpias, conforma uno de los manantiales más grandes de Europa. Este es considerado como el mejor ejemplo de río kárstico subterráneo. Con tonalidades turquesas oscuras, el río fluye desde una cueva kárstica ubicada debajo de unos acantilados de 240 metros de altura.
Para acceder al interior de esta cueva debes subirte a un bote y explorar las profundidades de la montaña, resulta fascinante poder conocer la montaña desde dentro. El recorrido del Buna es corto, de unos 9 kilómetros hacia el oeste, para acabar desembocando en el Río Neretva.
Por otra parte, con la llegada de los otomanos siglos atrás, el sultán turco de la expedición quedó maravillado con el espectáculo natural. En 1520 ordenó a construir un Tekija o Blagaj Tekke (el monasterio sufí de los derviches) en el punto exacto donde nace el río Buna.
Los Derviches son una hermandad sufí conocida por su ascetismo. En este culto se predica la dimensión más mística del islam en la que la contemplación pacífica de la naturaleza juega un papel muy importante. De ahí el posicionamiento estratégico del Tekke sobre el margen de las aguas.
Monasterio de los Derviches
Blagaj Tekke o Tekija es una casa Derviche que te atrapa al instante con su diseño que mezcla la arquitectura otomana y estilo mediterráneo. Se caracteriza por tener un bonito acabado de madera de doble fachada blanca, techos de piedra, suelos cubiertos de alfombras, balcones, puertas talladas y baños con un techo de vidrios coloridos en forma de estrella.
El tiempo y los deslizamientos de rocas ha obligado a llevar a cabo extensas reparaciones y reconstrucciones de los edificios originarios. Sin embargo, podemos apreciar con facilidad los esfuerzos de las autoridades locales para mantenerlo en buen estado de conservación.
Este templo es un lugar en el que los Derviches realizan sus cántico de alabanza a Dios llamado Zikr con una frecuencia de tres noches a la semana mediante un ritual especial.
Durante muchos siglos Blagaj Tekija se usó como lugar de encuentro para disfrutar de tertulias amistosas sobre temas científicos. En la actualidad, se sigue manteniendo esta tradición permaneciendo abierto de forma gratuita a los visitantes durante todo el año.
Adentro sirven té, café turco y bebidas refrescantes, las cuáles podrás saborear en el hermoso jardín mientras disfrutas de la magnifica vista del manantial.
Junto a Tekija hay una Turbe, es decir, un mausoleo donde se encuentran los sepulcros de los jeques Sari Saltuk y Acik Pasha. También podrás encontrar La casa de huéspedes del monasterio, llamada Musafirhana.
El casco antiguo de Blagaj
El centro histórico es ideal para recorrerlo y conocer el ritmo de vida tranquilo de sus habitantes. Te darás cuenta al instante de que la mayoría de sus viejas estructuras son un vestigio de la época otomana.
Es indispensable que saborees algún plato de su deliciosa gastronomía; de hecho, es común que en los restaurantes te sirvan platillos tradicionales de pescado o de carne salpicados con un toque de vino. Como postre, puedes disfrutar de un tarro de la miel típica de la zona.
Sus alrededores, el fuerte de Blagaj
Una huella del pasado turco de la ciudad se encuentra a 45 minutos a pie desde Blagaj Tekija. Nos referimos a el Tekke (o Castillo de Blagaj) que fue construido en 1766 con elementos del estilo barroco-turco clásico. Sin lugar a dudas, es un bonito ejemplo de mampostería de piedra Otomana.
La majestuosa casa actualmente es un museo abierto al público que se puede visitar durante todo el año. También te recomendamos que transites por la zona del valle del Neretva, un sitio idóneo para disfrutar de un picnic mientras te enamoras del paisaje. El camino será fácil de encontrar a pesar de que no esté bien delimitado.
Además del Tekke, también se pueden visitar los puentes de Blagaj, el puente Karbađoz-beg y el puente de Leho, todos con las singulares características de la arquitectura otomana. Además, hay distritos residenciales como la casa Kolakovic, el complejo residencial Velagic y la torre Kosic que valen la pena conocer.
Mejores tours a Blagaj
La mayoría de los tours que incursionan por Blagaj oscilan entre, aproximadamente, €50 y €200 ya que incluyen otros lugares que debes visitar en Bosnia. Entre estos se encuentran Konjic Bridge, Old Bridge (Stari Most), Pocitelj y Kravice Falls. Los que te recomendamos por sus buenas puntuaciones, precios accesibles y lo completo de su itinerario son Mostar Blagaj Kravice Tour, la excursión de un día a Blagaj y Kravice desde Mostar, y el tour del Puente Viejo de Mostar y las Cuatro Perlas de Herzegovina desde Sarajevo.
En este listado de tours debes tener claro que no se contemplan los costes de alimentación ni las entradas a los atractivos turísticos. Sin embargo, la excursión privada a Blagaj y Kravice desde Mostar y que pasa por Kravice Falls y Super Fall es una propuesta a considerar por su precio. ¡Anímate a visitar este fascinante pueblo de Bosnia!